Es una tierra árida con atardeceres cálidos. Una tierra que nunca supe con quién compartir, porque es como un tesoro. Una tierra en la que uno querría perderse para terminar siempre en sus aguas.
Los paraísos no están en otros mundos.
Fotos: Oihane Zuazua Mármol, Agosto 2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario